Conservación del patrimonio artístico

Los museos y galerías son instituciones destinadas al servicio público, con carácter cultural y educativo. En ellos se fomenta y desarrolla la apreciación de las artes plásticas, así como la formación, conservación y empleo de una colección de obras.
Los museos, conservan colecciones de distinta e igual naturaleza, poseen obras artísticas y objetos históricos y contemporáneos, para conocer el pasado cultural, conocer el presente y proyectarse al futuro. Describen la historia cultural de una región, de una nación o territorio en particular.
Los museos se han clasificado en: Museo de arte, de antropología, de ciencia y tecnología, de historia, entre otros.
Las Galerías son lugares de exposición permanente, en espacios cerrados o abiertos. No almacenan colecciones y se dedican a dar a conocer lo a los artistas más recientes, pueden ser públicas o privadas, en cambio las colecciones son un conjunto de bienes culturales de museos y galerías, logrados mediante donaciones, compras o reubicación de obras de todo tipo. Se estructuran en función de un tipo o de varias manifestaciones artísticas. Pueden ser públicas o privadas.
Conservación y restauración del patrimonio artístico
Al hablar del cuidado del patrimonio artístico nos referimos a la protección de monumentos, así como a la fisonomía de las ciudades. La conservación es el conjunto de disciplinas, mediante las cuales se garantiza la supervivencia y preservación del patrimonio cultural. La conservación es la intervención destinada a devolver el estado original de cualquier objeto, documento escrito, monumento o lugar arqueológico.
Museología y museografía
La museología es la ciencia del museo, estudia la historia y la clasificación de los diferentes museos, de acuerdo con la relación que guardan con el medio ambiente físico y su función en la sociedad.
La museografía se encarga de la ubicación geográfica de los monumentos artísticos, de las galerías y de los museos.

Un comentario en “Conservación del patrimonio artístico

  1. La necesidad de proteger los bienes que integran al Patrimonio Cultural, surge con la demanda de preservarlos de la destrucción indiscriminada que padecen tanto por la mano del hombre como por el paso del tiempo y los desastres naturales. Es también importante porque el Patrimonio Cultural es parte de la riqueza de todos, pero al igual que muchos recursos naturales como el agua, la vegetación autóctona etc., el Patrimonio Cultural es un recurso no renovable en lo que respecta a su pasado, y es por eso mismo que se manifiesta tangiblemente como recurso intocable e irremplazable de un pueblo.

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